2010/12/07

FACHADAS VERDES, EL JARDÍN VERTICAL

M.Sc. Arq. Ramiro Zalles Pinell*




Si bien desde los tiempos de Babilonia y sus famosos jardines colgantes, la vegetación juega en el campo arquitectónico un protagonismo fundamental como elemento ornamental, hoy en día, enmarcada en el desarrollo sostenible , asume un nuevo rol que implica una visión eco-proyectual, acorde con los cambios globales y el espíritu del tiempo y el lugar bajo tres principios fundamentales, Reducir, Reutilizar y Reciclar. La sustentabilidad significa producir lo que necesitamos sin dañar los recursos de la producción. En la actualidad las líneas teóricas de la sostenibilidad se orientan a problemas diferenciados en materia ambiental.

“La erosión del suelo: la pérdida del suelo destinado para la agricultura a causa de agua, viento y actividades humanas. La pérdida de la superficie del suelo también reduce la capacidad del suelo de absorber agua de lluvia, haciendo que se sequen ríos, pozos y arroyos.

La desertificación: muchos de los desiertos del mundo de hoy en día fueron en un tiempo bosques o tierra usada para la agricultura. Es imprescindible que se aliente a las personas a plantar árboles y que se introduzcan métodos de agro-forestería a la agricultura.

El crecimiento de la población: a medida que la población mundial va creciendo, también aumenta la presión sobre la tierra y sus recursos. Cualquier progreso que un país haga en el campo de la educación y la producción agrícola, tendrá poca impresión sobre el desarrollo si el índice del crecimiento de la población continúa aumentando.

La contaminación: Los gases industriales emitidos por las fábricas podrán causar problemas respiratorios y de la vista, sobre todo en las zonas urbanas. Los ríos y el mar se usan a menudo como basurales, lo cual causa muchos problemas.

Basura: todos producimos basura, ya sea basura de la casa o desechos industriales y de fábricas. La manera en la cual nos deshacemos de esta basura no siempre es sustentable. Tanto las personas como las compañías y naciones son expertas en poner la basura fuera de vista y olvidarla. Sin embargo, si nos hemos deshecho de basura ineficientemente, tarde o temprano surgirán los problemas. Para deshacerse de la basura de una forma apropiada es necesario tener dinero y poner esfuerzo. Es necesario obligar a las compañías a que se deshagan de sus desechos de una forma segura y que prevengan la contaminación. El interés del público es la presión más efectiva. Pero la mejor forma de reducir la contaminación causada por los deshechos es reducir (usando los recursos más eficientemente) la cantidad de basura que producimos. Muchas naciones sobre todo las ricas, están aprendiendo esta lección.

Energía y falta de combustible: los recursos mundiales de combustible fósil (leña, carbón, petróleo y gas) se están agotando a una velocidad alarmante. Además el consumo de combustible en las fábricas, los vehículos y en los hogares ha aumentado la cantidad de dióxido de carbono en la atmósfera. Esto actúa como una manta alrededor del mundo, provocando climas más calientes (lo que llamamos “el efecto invernadero”). Los científicos recién ahora comienzan a descubrir lo que esto significa. Las temperaturas más altas en la tierra podrían causar que se derritan los casquetes de hielo polares, que suba el nivel del mar, además de cambios en la producción de cultivos, desequilibrios en las plagas de insectos y cambios de clima y patrones de lluvia” .

Ciclo del Agua: En el entendido de que el agua es en la realidad global un recurso estratégico para la sostenibilidad, se implementan sistemas de tratamiento orientados a dos mejoras en el ciclo del agua, primero un sistema de captación y purificación del agua de lluvia para que la misma pueda se reutilizada en el proyecto, segundo un sistema de calentadores por serpentín que aminoran el consumo energético.



Es en este contexto, que entre las múltiples intervenciones realizables, la arquitectura orientada hacia el Desarrollo Sostenible, o Ecotectura (como ha venido a llamarse), juega un rol preponderante. Vale decir, un arquitecto puede hacer más por el medio ambiente con una sola casa ecológica, que un abogado reciclando papel durante toda su vida profesional, sin desmerecer, por supuesto, a ninguna profesión, simplemente, el hecho arquitectónico tiene alcances de acción inmediata en el medio ambiente y el equilibrio de los ecosistemas.

Por lo tanto la incorporación de fachadas verdes en los edificios proporcionan, entre otras las siguientes ventajas. Colaboran con la oxigenación ambiental como resultado de la fotosíntesis y por lo tanto con la reducción del proceso inverso al de la generación de los gases CO2 que provocan el efecto invernadero y el cambio climático, el deshielo de los glaciares, etc. Incrementan la inercia térmica del edificio, reduciendo los costos energéticos de calefacción artificial y aire acondicionado. Contribuyen a la humidificación de la ciudad, capturando partículas de contaminación emitidas por la combustión de los combustibles fósiles. Finalmente, estos jardines verticales pueden combinarse con invernaderos, muros Trombe y otros para lograr mayor eficiencia bioclimática, incrementando de esta manera nuestras posibilidades de reducir el calentamiento global.

*Magister en Arquitectura y Diseño Urbano, Máster en Administración de Proyectos, Docente universitario, especialista en Patrimonio Cultural, Eco-tectura, Arquitectura Contemporánea y Diseño Urbano.

Bibliografía

GISSEN, David; “Big And Green, Toward Sustainable Architecture in the 21st Century”; Princeton Architectural Press; New York, USA; 2002.

JODIDIO, Philip; “Green, Architecture Now”; Taschen; Slovenia; 2009.

MIRANDA, Rodrigo, Artículo “¿Que es una fachada verde?”, La Tercera – Suplemento de Tendencias, Santiago de Chile, 11 de noviembre de 2010.

CARTER, Mike; Artículo “La Sustentabilidad, El Tema Ambiental Clave”, Boletín: Paso a Paso, Nº 20, Noviembre de 2004.

http://www.ecoactualidad.com/arquitectura/fachadas-verdes-la-expansion-vertical-de-la-naturaleza/

http://patrullaverde.net/main/archives/1323#more-1323

Imágenes Web, Edificio Consorcio, Enrique Browne y Borja Huidobro, Santiago de Chile